Y llega un día en que decides que quieres volver a ser feliz,
y al decidir esto te das cuenta de la complejidad de esta palabra.
La felicidad, ¿cuàntas locuras se han hecho para conseguirla?
¿Y cuántas veces el hecho de buscarladesesperadamente sólo conlleva frustración y fracasos?
Han sido, son y serán muchos los que han llorado, lloran y lloraránpor estos fracasos, fracasos impotentes e inmensamente tristes, porque dejan al descubierto que no has elegido correctamente la dirección de tus pasos y que estás vacío pordentro, que estás desorientado.
Cuando buscas la felicidad en el lugar equivocado y no lo consigues, y las lágrimas caen suavemente por tus mejillas, en este momento estás empezando a entender, aunque tú no lo sepas,lo esencial:
la felicidad no se busca, simplemente se encuentra.